Daños a terceros
Se considera daños a terceros al perjuicio que puede ocasionar una persona a otra, que no sea su dependiente directo y con la que no tenga lazos consanguíneos.
Las compañías de seguros ofrecen dentro de sus productos pólizas básicas de responsabilidad civil; este tipo de protección respalda contra el daño ocasionado a un tercero, pero no ampara los daños sufridos por el asegurado.
Crédito: SiSeguros |